El ejercicio físico es importante tanto para los adultos como para los niños.Ya sabemos que nuestro cerebro es un devorador de oxígeno. También sabemos que la práctica de ejercicio aeróbico aumenta la secreción de neurotransmisores como la serotonina o la dopamina que nos ayudan a almacenar información en la memoria. Cuando realizamos una actividad física estamos ejercitando nuestro corazón y de este modo estamos contribuyendo a rellenar la reservas de oxígeno que nuestro cuerpo necesita. Así no solo cuidamos nuestro cuerpo sino también nuestra mente.
Pero el cuidado del cuerpo tiene otra dimensión, la educativa. ¿Qué entendemos por «educación física»?
Este concepto incluye algo más que la mera práctica de un deporte o ejercicio físico, es ser consciente de nuestro cuerpo, es conocer qué pasa si no mantenemos una postura correcta, si día a día no cuidamos nuestros hábitos posturales.
Ya sabemos que cuando los niños realizan un deporte individual están trabajando en la disciplina, en marcar unos objetivos a cumplir, en analizar las circunstancias que han provocado que el resultado no sea el esperado. También aprenden a tolerar la frustración a conocer los límites y a cumplir con las normas.
Con la práctica de un deporte de equipo se aprende a ser solidario, a ayudar a tus compañeros a colaborar para conseguir el resultado deseado, se aprende organización y planificación.
Pero no debemos olvidar ese otro aspecto del cuidado físico, el de tomar conciencia de nuestro propio cuerpo.
¿Cómo podemos transmitir a nuestro hijo la importancia del cuidado de su cuerpo? Ya sabemos que los padres somos el referente para nuestro hijo así que la mejor forma será ser un ejemplo. Si nosotros cuidamos nuestra higiene postural el niño también lo hará, si nos ve sentados correctamente, si ve que cuidamos la forma en la que cargamos peso o incluso llevamos la mochila no dudéis de que hará exactamente lo mismo.
Practicar un deporte sea cual sea nos permite compartir con ellos un espacio y un tiempo que nos ayudará a crear vínculos, a establecer canales de comunicación y a vivir momentos divertidos que involucran a toda la familia. Ser consciente de que debemos cuidar nuestras posturas contribuirá no solo a prevenir futuras lesiones sino también a obtener un óptimo desarrollo físico de tu hijo.
Practicar ejercicio físico y cuidar nuestras posturas forman parte, en definitiva de lo que denominamos Educación Física.