Son muchas las empresas que tienen sensibilización social y que se embarcan en la formulación e implantación de su propia Responsabilidad Social Corporativa. Es así como las Empresas se adaptan a las tendencias actuales, contribuyendo activamente en la mejora social, económica y ambiental.

En esta línea las Empresas tomar medidas de conciliación para sus profesionales.

Ahora, si queremos que la conciliación dentro de la empresa sea una estrategia de mejora social, hay que hacerlo bien. Por ejemplo, la Fundación másfamilia aplica su propia herramienta de gestión que permita diseñar, estructurar, sistematizar, medir y evaluar y, en definitiva, gestionar la conciliación, la responsabilidad familiar y la igualdad de oportunidades, existen otras herramientas de gestión, pero lo realmente importante para implantar un Plan de Conciliación en nuestra Empresa es hacer las preguntas adecuadas si queremos que sea eficaz recoger los máximos beneficios de dichas acciones.

¿Qué?

Para saber qué acciones tiene que tomar la Empresa para ofertar medidas de conciliación, lo primero que puede hacer, es preguntar directamente a sus empleados.

Son ellos los que conocen sus necesidades reales.

Muchas veces desde los departamentos de RRHH lanzamos ofertas de conciliación, y es luego cuando aplicamos marcadores de satisfacción laboral. ¿No sería más razonable preguntar primero?, es decir, presentar las ofertas que la empresa está dispuesta a implantar, e invitar a los trabajadores a proponer que otras acciones serían conciliatorias para ellos.

En este primer acercamiento a los empleados se pueden recoger datos muy interesantes. Datos que nos ayudarán a tomar acciones conciliadoras que realmente refuercen el vínculo empleado-empresa.

¿Cómo?

Pues como todo proyecto; con unos objetivos cuantificables, desarrollando un plan de acción, con un equipo de trabajo, estableciendo sus propios procesos, con cuadro de mando para implantar y comunicar la estrategia a toda la Empresa y por supuesto un presupuesto.

Y ¿cuándo?

Cuando exista un compromiso explícito de la Dirección.

Muchos planes de conciliación no obtienen los resultados esperados porque los empleados no se sienten libres de acogerse a la oferta conciliadora, no sienten seguridad, tienen dudas, ¿habrá consecuencias?, ¿estará mal visto para mi promoción interna?, …

Es necesario que antes de implantar medidas de conciliación dentro de la Empresa, la dirección esté realmente convencida y comprometida con las medidas de conciliación, creer firmemente en los beneficios y rentabilidad para la organización, y comunicar a los empleados que esta nueva estrategia es una de las claves que les permitirá mantener la competitividad de la Empresa en el futuro, y que apuestan por ella, al igual que hacen con las estrategias de desarrollo de producto, gestión de ventas, innovación y desarrollo.

Fuentes: El valor estratégico de la conciliación. Modelo de gestión EFR.